Sergio Andrés Sánchez Sanjuán: un intelectual que engrandece a nuestro pueblo

Hijo de Yolanda Sanjuán Rincón y Alfredo Sánchez Márquez, hermano de Magda Milena, este ocañero de 23 años formado en la escuela urbana Kennedy y en el Colegio Alfonso López, es ingeniero electrónico de la Universidad Sergio Arboleda donde se graduó con honores Summa Cum Laude, por tesis con promedio de cinco.

Actualmente es joven investigador de Colciencias y trabaja en el proyecto aeroespacial que busca enviar al espacio al segundo satélite colombiano llamado Libertad II, particularmente es el encargado de implementar el sistema de energía de este satélite.

Es miembro del observatorio astronómico de la Universidad Sergio Arboleda y además integrante de la organización “Mensa Internacional”, que congrega a las personas superdotadas en el mundo.

Sergio Andrés con una acción de vida contribuye al engrandecimiento de nuestro pueblo.

 

Sergio Cuenta Con Voz

CCV: Usted tiene un coeficiente intelectual de 148 sobre 160, y es miembro de “Mensa Internacional”, organización exclusiva para superdotados ¿En qué momento de la vida descubrió que tenía una inteligencia superior y como afrontó esto su familia?

SS: Siempre he pensado que la inteligencia de una persona es algo relativo y se logra adquirir con la experiencia de la vida misma, se puede construir y responde a dos factores: la disciplina de las personas, algo que me ha caracterizado toda la vida, y la capacidad crítica de asumir situaciones. Cuando entré a la Universidad muchos profesores y compañeros me motivaron a presentar el examen para ser miembro de “Mensa”. Durante la Universidad tenía miedo de hacer el examen pues no quería desilusionar a mis compañeros. Pero me arriesgué y superé el examen. Digo que la vida misma me enseñó a descubrir mis capacidades con cada una de mis acciones, y mi familia se ha sentido muy orgullosa de eso, pues además que he sido el consentido de la familia, ellos han puesto todas las esperanzas en mí, pues la familia ha tenido muchas dificultades, y les devolví el apoyo que me han dado todo este tiempo.

CCV: Bueno, déjeme tratar de entender algo, y vamos por partes, ¿Estudió el bachillerato y no sabía que era superdotado?

SS: No. Yo creería que no. Incluso en la Universidad me sentía como un estudiante cualquiera, que simplemente tenía un poco más de dedicación. Muchos profesores me decían, e incluso en dos ocasiones me intentaron adelantar de año por las capacidades impresionantes que tenía, pero tanto como mi mamá y yo decidimos que no porque creía que lo mejor de todo esto es vivir la experiencia completa de la vida. Al llegar a la Universidad me di cuenta que algo diferente podía tener porque en el primer semestre de mi carrera logré el promedio de 5.0 lo que me valió a alcanzar una mejor beca que la que tenía por el ICFES y estudiar absolutamente pagado por la Sergio Arboleda.

CCV: Pudo escoger cualquier Universidad del país para estudiar ¿Por qué la Sergio Arboleda?

SS: La escogí por el desarrollo aeroespacial: de niño era amante de la astronomía, veía la serie de Cosmos de Carl Sagan, y siempre era fanático de ver por un telescopio, aunque solo lo pude hacer al llegar a la Universidad. La Universidad tiene el apoyo del doctor Cesar Ocampo que fue integrante de la NASA y hoy es el decano, eso me motivó mucho para ingresar a esa facultad.

CCV: Ahora si voy al punto ¿Usted realmente pretende convencerme de que no se nace superdotado?

SS: Jajaja. La verdad cada quien tiene su posición al respecto. En el trasfondo creo que la misma evolución ha permitido que cada persona tenga la posibilidad cognoscitiva y crítica de conocer su entorno. Creo, quizá, por la formación de humildad que tengo desde la familia que cada uno tiene una inteligencia que puede desarrollar. Sin embargo, es posible que haya nacido con cierto privilegio que he logrado desarrollar con el paso del tiempo.

CCV: Usted ha hecho parte de los proyectos de construcción de los satélites Libertad I y II, los primeros de Colombia ¿Es consciente que ha hecho parte de quienes están escribiendo nuestra historia aeroespacial?

SS: Es más, cabe aclarar que Colombia fue el primer país en Latinoamérica que desarrolló su propio satélite y lo envió al espacio. En este campo Colombia hace diez años no era absolutamente nada, por lo que si soy consciente y orgulloso de portar esa bandera en pro de que el país en unos años va a poder desarrollar su propio programa espacial, y se espera que con Libertad II alcancemos ese programa. La verdad me siento muy feliz por eso porque es como un sueño hecho realidad.

CCV: ¿Su sueño está en construir artefactos aeroespaciales o en ir al espacio?

SS: Es una dura pregunta. De niño en alguna ocasión tuve que haber dicho que quería ser astronauta. En estos momentos lo pensaría dos veces, pues últimamente ha habido muchos problemas en el campo, sondas que han colisionado, el Falcon 9 que iba a la Estación Espacial Internacional explotó hace poco. Claro que ya se logró llegar a la Luna, pero creo que fue un golpe de suerte. Prefiero ser como esas personas que desean solucionar esos problemas.

CCV: El satélite libertad I se puso en el espacio ¿Con qué cohete hicieron eso?

SS: Si señor se puso en el espacio pero Colombia no está en capacidad aun de hacerlo. Se hizo a través de un cosmódromo que queda en Kazajistán, donde se creó la Ciudad de las Estrellas, es decir la base espacial donde Yuri Gagarin hizo su primer vuelo en el espacio. Ahora existe allí una empresa que recibe los satélites y los embala en un cohete balístico, de los que sobraron de la guerra fría, y se pone en el espacio.

El libertad I se puso en el espacio y ahora es basura espacial pues ya pasaron 7 años, pero cumplió su objetivo que fue transmitir datos del espacio al país y además se demostró que en Colombia se podía desarrollar tecnología aeroespacial.

CCV: ¿Cuál es ahora el propósito del Satélite Libertad II?

SS: Estamos en proceso de desarrollo, se espera que se lance en el año 2017, y este satélite que va a ser más grande, tendrá una cámara para observación de la tierra que hará mediciones de la situación climatológica del país y de los recursos naturales.

CCV: ¿No será que te termina pasando lo que le pasa a la mayoría de científicos en Colombia que se cansan de no tener apoyo a su trabajo y se van del país?

SS: Es algo que he pensado muchas veces. A Colombia hay que apoyarla, sin embargo debe ser un apoyo conjunto de muchas organizaciones. Más que el apoyo económico, se necesita lo que yo llamo la cultura científica, que es la capacidad de reconocer a las personas que han logrado el desarrollo científico y tecnológico. La labor de la ciencia en Colombia ha sido un poco marginada. Si la misma gente pujara, seguramente esos recursos que se destinan a la guerra pudieran destinarse al desarrollo tecnológico que tanto le falta al país.

CCV: Bueno, pero ¿Se va a ir del país?

SS: A mí me gustaría. Lo digo para prepararme mejor. Tengo en mente hacer un postgrado en ingeniería aeroespacial en un país que esté asociado a una agencia espacial.

CCV: Hace poco estuvo en los Estados Unidos representando al país en la conferencia aeroespacial de 2015. ¿Cómo le fue allá? ¿Qué es eso de un Nanosatélite tipo Cubesat 3U, nombre que con solo escucharlo parece sacado de la película de Hombres de Negro?

SS: Créame que no estamos lejos de alcanzar lo que muestran las películas de ciencia ficción. En Estados Unidos asistí a la conferencia aeroespacial que reúne a las universidades que desarrollan proyectos aeroespaciales y llevé mi proyecto de investigación que es sobre el sistema de energía del Nanosatélite. Este tipo de satélites en forma de cubo es el futuro del desarrollo aeroespacial, son tan pequeños que caben en la palma de la mano, pero son muy potentes, por ejemplo con un Satélite de estos, Brasil estudia su campo magnético. Me llevé la sorpresa de que fui el único hispanohablante que asistió al congreso y muchos me felicitaron.

CCV: Lo más cercano que los ocañeros tenemos a un ingeniero de la NASA es usted, ¿Será que los niños y jóvenes de la provincia pueden soñar con ser astronautas o construir cohetes y satélites? O ¿Es mejor que se dediquen a ser abogados, administradores, ingenieros civiles, etc?

SS: Aquellos que sueñen con ser astronautas, ¡que persigan ese ideal! Aunque dentro de un proyecto aeroespacial hay multiplicidad de disciplinas. Hay muchas personas que están en la NASA y no se dedican a las ciencias, pues están los que manejan el presupuesto del proyecto, los que administran el personal e incluso hay una rama que se llama el Derecho Espacial, que trata sobre los derechos de un país en el uso de la órbita geoestacionaria, que implica una cantidad de compendios legales que un ingeniero no puede manejar.

Yebrail Haddad Linero

Yebrail Haddad Linero

Nativo de Ocaña. Es Abogado y Magister en Derecho de la Universidad Externado de Colombia. Se ha desempeñado como profesor universitario, asesor del Consejo Nacional Electoral, Director de Procesos Judiciales y Administrativos de la Gobernación de Cundinamarca, Personero y Alcalde de Ocaña, Director del Sistema Nacional de Bienestar Familiar y Asesor de Gobernabilidad para la Paz del Programa de Naciones Unidas.

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